Oración La Magnífica En Tiempos Difíciles
En estos días de incertidumbre y pandemia por el Covid 19, la oración es el medio de sanación que Dios nos regló, la Magnífica es una oración potente en esta época tan dificil.
Esta oración aplicada con fe y devoción es excelente para aquellos casos difíciles, solo encomiende esa petición o enfermedad que le atormente y ha sido dificil de solucionar, a la virgen María.
Pídale con devoción que pronto termine esta pandemia, que salve a los nuestros y el mundo entero sane y Dios nos llene de bendiciones que él es el que todo lo puede y que a través de su madre de consuelo y sanación a los necesitados.
Pídale con devoción que pronto termine esta pandemia, que salve a los nuestros y el mundo entero sane y Dios nos llene de bendiciones que él es el que todo lo puede y que a través de su madre de consuelo y sanación a los necesitados.
LA MAGNIFICA
Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador, porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí. Su nombre es Santo y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación.
Él hace proezas con su brazo, dispersa a los soberbios de corazón. Derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos despide vacíos.
Auxilia a Israel su siervo, acordándose de su santa alianza según lo había prometido a nuestros padres en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo como era en principio ahora y siempre por los siglos de los siglos.
Amen.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí. Su nombre es Santo y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación.
Él hace proezas con su brazo, dispersa a los soberbios de corazón. Derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos despide vacíos.
Auxilia a Israel su siervo, acordándose de su santa alianza según lo había prometido a nuestros padres en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo como era en principio ahora y siempre por los siglos de los siglos.
Amen.
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