El Poder De Las Mandalas
La palabra Mandala significa círculo en sánscrito, y se
define como “círculo encantado” o “círculo mágico”.
Su diseño geométrico transmite estabilidad y equilibrio. De
esta manera, se recuperar nuestra armonía innata y creativa.
El Mandala puede ser una guía para ubicarnos en nuestro
centro más profundo y así integrar los diferentes aspectos de nuestra vida.
Puede ayudarnos también a superar la sensación de desintegración que tan
frecuentemente se experimenta hoy en día.
A medida que profundizamos nuestro conocimiento en el
Mandala, el potencial guardado en nuestro interior comienza a manifestarse cada
vez con mayor intensidad.
El pájaro dispone su nido y la araña teje su tela. Los
planetas giran en torno al sol y las partículas bailotean alrededor del núcleo
del átomo. Una sabiduría remota parece haber trazado cada rincón de la
naturaleza a partir de un planteo circular. Sólo algunos hombres –también
sabios- supieron que si creaban formas similares, el espíritu humano estaría
acompasado con el ritmo del universo; así nacieron los mandalas, diseños
sagrados inspirados en los secretos de la Naturaleza.
Desde el punto de vista espiritual es un centro energético de
equilibrio y purificación que ayuda a transformar el entorno y la mente.
También se le define como un sistema ideo
gráfico contenedor de un espacio sagrado.
Los mandalas son utilizados desde tiempos remotos. Tienen su
origen en la India y se propagaron en las culturas orientales, en las indígenas
de América y en los aborígenes de Australia.
Jung solía interpretar sus sueños dibujando un mandala
diariamente, en esta actividad descubrió la relación que éstos tenían con su
centro y a partir de allí elaboró una teoría sobre la estructura de la psique
humana.
Según la Psicología, el mandala representa al ser humano.
Interactuar con ellos te ayuda a curar la fragmentación psíquica y espiritual,
a manifestar tu creatividad y a reconectarte con tu ser esencial.
El trabajo de meditación con mandalas puede consistir en la
observación del mismo o el dibujo de éstos.
En el primer caso, con sólo sentarte en un lugar cómodo,
lograr una respiración rítmica y profunda, y disponerte a observar algún
mandala de tu elección, puede llevarte a un estado de relajación y te sentirás
más alerta ante los hechos que suceden a tu alrededor. El proceso de
observación puede durar entre tres y cinco minutos.
– La cruz del mundo conecta la sustancia de origen materno con la energía, formando un punto central.
– La cruz del mundo conecta la sustancia de origen materno con la energía, formando un punto central.
En segundo es pintar tus propios mandalas. Escoge un modelo
que te llame la atención, selecciona los instrumentos (colores, marcadores,
acuarelas, por ejemplo), y luego instálate en un sitio tranquilo y también
puedes colocar música si lo deseas -algún mantra sería ideal- y comienza tu
trabajo. No existe una un Mandala bien o mal pintado. Dejate llevar por los
colores que tu corazón sienta. Si ves, un parte del mandala que automáticamente
se te ocurrió pintarla de verde, hazlo. No lo racionalices mucho.
Otra función de los mandalas, es bloquear energías negativas.
Colocar Mandalas de adorno en tu pieza, lugar de meditación o cualquier parte
de tu casa; evita que energías negativas entren el ambiente. Colocados en
tu habitación de descanso, va a generar en ti un mejor sueño.
Todo en el Universo es geometría. Somos Mandalas en
Movimiento interactuando unos con otros en el océano mandálico de la
existencia.
Cada Mandala es único e irrepetible y lleva impresa tu propia
impronta energética Cósmica y Divina.
Guiados por tu fecha de nacimiento obtenemos la Nota Musical
que resuena con tu firma galáctica, la cual nos ayudara a realizar el Mandala.
Todo el proceso se realiza mediante la Conexión con tu Ser
Superior.
Elementos que forman la estructura de un Mandala
– El círculo hace referencia a las cosas que no
tienen nombre y que no se pueden unificar, mientras que el punto central
representa el núcleo divino o el yo.
– La línea horizontal separa la parte superior del
mundo de la inferior. Es símbolo de la energía de origen materno.
– La línea vertical conecta el mundo terrenal con
el sagrado y simboliza la energía.
– La espiral significa desarrollo y dinámica del
proceso interior.
Símbolos de las formas de un Mandala y su Significado
Ojo: clarividencia, ojo de Dios y el Yo.
Árbol: vida que se renueva por sí misma, conexión con el
subconsciente, conciencia, crecimiento, sentimientos maternales, arraigo pero
también estancamiento, personalidad.
Rayo: iluminación, sabiduría, energías espirituales,
curación.
Flor: belleza, fugacidad, alma, matriz.
Triangulo (vértice hacia arriba): fuerza de vida,
cambios, masculinidad, creatividad.
Triangulo (vértice hacia abajo): agresiones contra uno
mismo.
Corazón: amor y felicidad, sol, valor, sentimientos,
reconocimiento y voluntad.
Hexágono: unión, finalización de trabajos, armonía y
satisfacción.
Círculo: movimiento, lo absoluto, Dios, el Yo.
Cruz: unión cielo y tierra, subconsciente y consciencia, vida
y muerte, dificultades, reconocimiento aspectos oscuros, superación de la
propia estructura instintiva.
Laberinto: búsqueda del propio centro.
Cuadrado: equilibrio, razonamiento, perfección,
transformación del espíritu en materia.
Cuadratura del círculo: unión cielo y tierra, opuestos
equilibrados, energía del yo, purificación.
Rueda: empuje y dinámica.
Arco iris: unión Dios-Hombre, principio masculino y femenino,
fertilidad, renacimiento.
Mariposa: auto-renovación del alma, cambios, muerte y
renacimiento.
Telaraña: feminidad, estado fetal, niñez, nuevo comienzo.
Espiral: fuerza de vida, energías curativas, afán de unidad.
Estrella: persona realista, sentido identidad,
autoconciencia, superación, individualidad.
Animal: aspectos instintivos, símbolo para estados del
subconsciente.
Gotas: masculinidad, fertilidad, purificación interior.
Pájaro: alma humana, símbolo del espíritu, fantasía.
Los números en los Mandalas y si significado
Las formas no son otra cosa que números cambiados por
imágenes y siempre son factores que ordenan el cosmos. No solo determinan la
esencia de todas las cosas existentes en la naturaleza, sino que también las
dominan, ya que son las causas de su orden.
Uno: Postura erguida del ser humano, símbolo del origen,
unidad y totalidad, Dios e individualidad, centro como unión de fuerzas,
integridad, vivencias infantiles.
Dos: gemelos, el oponente, su pareja, creación y procreación
pero también separación, contradicciones y diferencias, dudas y conflictos,
materia, Yin.
Tres: movimiento, vitalidad, estímulo, proceso, símbolo para
el hombre, la mujer y el niño, lo nuevo y las realizaciones, independencia, lo
divino, auto-reconocimiento, Yan.
Cuatro: totalidad, alejamiento y tranquilidad, unifica
opuestos, racionalidad, desarrollo de la conciencia, búsqueda del propio lugar
en la vida y del auto-reconocimiento.
Cinco: unidad, símbolo del centro y del amor, conexión
armónica del Yin y Yan, rechazo del mal, salud, sexualidad, sensualidad,
conexión con la realidad, sueños.
Seis: femenino y masculino, unidad y penetración, unión de
contradicciones, creatividad, perfección, final de un proceso creativo,
satisfacción y realización.
Siete: cielo y tierra, vía hacia desarrollo personal, final
de una etapa en la vida, trabajo interior.
Ocho: orden y equilibrio cósmico, felicidad, armonía,
simetría, infinito, constante cambio y renacimiento, totalidad, el propio Yo.
Nueve: mente creativa, símbolo del cielo, enigma existencia
humana, energías espirituales positivas.
Diez: círculo cerrado, unidad y totalidad, perfección y
principio de Dios, virtud y moral, matrimonio, visión real de la vida.
Once: conflictos indisolubles, pecados, caos, transición.
Doce: unidad y totalidad, felicidad, cumplimiento en el
tiempo y espacio, perfección, redención, ciclo vital de la naturaleza, acabado,
eterna espiral del desarrollo.
Trece: engaño e infidelidad, final infeliz, culminación del
proceso interior.
Es un número de fuertes transformaciones. Indica asuntos
mágicos en el aire y que deben ser tomados en cuenta (el hada trece del cuento
de la bella durmiente es la malvada bruja). El trece señala fuertes cambios
para nuevos comienzos.
A veces, el trece en los mándalas indica confusión en los sentimientos y estar
desplazándose a una nueva fase, también indica que el peso del pasado puede ser
un obstáculo para la nueva dirección de nuestra vida, sobre todo porque aún no
se ha concluido con lo anterior, estar entre dos fuerzas.
También indica fuerte período de tribulación, gran esfuerzo y confusiones que
deben ser liberadas
El Simbolismo en los colores
AMARILLO
Por excelencia es el color del sol, de la intuición y de la
iluminación. Atributo del Dios Apolo, de la generosidad y del intelecto.
Tradicionalmente, corresponde al elemento aire.
Positivo: alegría, confianza, intuición, constancia,
crecimiento, sabiduría, liberación, espíritu emprendedor y fantasía.
Negativo: superficialidad, envidia, presunción y miedo a las
dificultades económicas.
AZUL
Tradicionalmente, es el color del cielo, del espacio y del
mar, profundidad y pensamiento. Relacionado con el elemento aire y con los
signos de piscis y sagitario.
Positivo: paz, tranquilidad, relajación, serenidad,
seguridad, bondad y lealtad.
Negativo: aburrimiento, paralización, vacío e ingenuidad.
BLANCO
Surgido de la combinación o visión simultánea de todos los
colores. Es el símbolo por excelencia de la pureza y la alegría. En la
cosmología hindú representa el ascenso hacia la luz originaria.
MARRÓN
Elemento de la tierra, de la arcilla pero también de las
hojas muertas, del otoño y de la tristeza. Para los romanos y cristianos es
símbolo de humildad y pobreza.
Positivo: calidez, tranquilidad, proximidad a los hechos
sencillos, humildad, materno.
Negativo: tristeza, pobreza, materialidad, dureza y frialdad.
NARANJA
Color de las llamas y del fuego. Simboliza el orgullo y la
ambición.
Positivo: optimismo, juventud, salud, alegría, sociabilidad,
ambición, ternura, cordialidad, valor, vigor, franqueza y confianza en uno
mismo.
Negativo: Afán de prestigio y frivolidad.
NEGRO Y GRIS
El negro, es en realidad, la carencia de color, el caos primigenio.
Representa la tierra, el luto o la tristeza. Se relaciona con los signos de
Acuario y Capricornio, con los planetas Saturno y Plutón y con el hierro.
Positivo: renovación, invencibilidad y dignidad.
Negativo: obligación, desesperación, desamparo, muerte,
destrucción, paralización, tristeza, pérdida, miedo, amenaza y oscuridad.
ROJO
Color por excelencia del amor y la pasión, de la sangre, el
fuego y los sentidos, que corresponde a las cualidades de la valentía y osadía.
Atributo del Dios Marte, de la Diosa madre de la India, del planeta Júpiter
(rojo oscuro) o del planeta Marte (rojo claro), y en general, del principio
vivificador.
Positivo: amor, sensualidad, pasión, confianza en sí mismo,
fuerza, resistencia, conquista, independencia y alegría de vivir.
ROSA
Color de la carne y de la sensualidad, asociado con el
romanticismo y el amor.
Positivo: romanticismo, elegancia, cariño, dominio de la
agresividad, abnegación, altruismo, suavidad, discreción y feminidad.
Negativo: necesidad de protección, inhibición y
sentimentalismo.
VERDE
Situado entre el negro y el rojo, entre la vida y la muerte.
Para los egipcios era el atributo de Osiris (Dios de la vida y de los
muertos).Tradicionalmente, representa al agua. Según la interpretación
cromática, este color se atribuye a la naturaleza y a la fertilidad.
Positivo: esperanza, naturaleza, equilibrio, crecimiento,
juventud, constancia, vida, voluntad, curación, belleza, simpatía, integridad,
bienestar, prestigio, purificación y regeneración.
Negativo: falta de sinceridad, ambición y poder.
VIOLETA
Suma del azul (devoción) con el rojo (pasión).Simboliza
nostalgia y recuerdo y posee las cualidades de prudencia, modestia, amor a la
verdad y arrepentimiento.
Positivo: magia, espiritualidad, inspiración, sentimentalismo,
individualismo y superación de las contradicciones.
Negativo: melancolía, pena, abandono y renuncia.
El análisis de lo numérico en el mándala no sólo se
realizará por la presencia del número dibujado sino por la suma de objetos,
figuras o tonos iguales que aparezcan en el mismo. Por ejemplo: tres
pajarillos, cuatro piedras o dos árboles, etc., en cuyo caso se analizará el
objeto en sí y el número por las veces que éste se repita, lo cual potenciará
el análisis final